domingo, 26 de diciembre de 2010

COMIENZA LA CUENTA REGRESIVA

Son las 03:14 de la mañana del 25 de Diciembre de 2010...
Ayer 24, estuve todo el día en casa, cené con mi familia y admiraba la gran cantidad de luces que puse para adornar, después entregaron los regalos y, obviamente, mi sobrina Amalia fue la gran festejada aunque ella no se daba cuenta porque dormía inocente en su cunita. Después conversamos un rato y ahora me encuentro solo escribiendo las cosas locas que pasan por mi cabeza y que trato de externalizar mediante este medio...
Ya se viene un nuevo año y, pensando en este que termina, puedo decir que me han pasado mil cosas... me siento un poco vacío de fe, de creer, de confianza; creo que en gran parte he sido culpable de eso y lo asumo, pero también creo que me he cansado de no preocuparme de mí mismo, de que no se me tome en cuenta, de que no se me valore o que todo lo que yo siento vale poco o nada; cargo con una culpa grande por dar pasos al lado, pero no me siento capacitado ni acompañado y lucho contra el individualismo que cada vez me carcome un poco más...
Sé que soy muy cerrado e intro con mis cosas y que son muy pocas personas con quienes puedo externalizar algo de lo que me está pasando, pero son las personas que no juzgan, que escuhan y que son capaces de poder abrir sus brazos y recibirme sin reprochar nada, incluso a veces sin decir nada, ya que la conexión es tan grande que las palabras están de más. Estos seres maravillosos han sabido valorar lo significativo de los detalles y que cada conversa y cada mensaje entregado tiene su razón profunda y que no son simples frases al viento... Si digo "te kiero" es porque de verdad lo siento, si digo "te necesito" es porque de verdad lo siento así, si digo "es importante para mí que estés" es porque simplemente sin tu presencia nada es lo mismo.... gracias a quienes supieron valorara estas cosas , sin cuestionar y sólo cediendo a mis peticiones de ayuda o de sólo compañía.
Es fácil decir muchas cosas, pero el llevarlas a hechos concretos y hacerlas empíricamente comprobables dan cuenta de lo difícil que resulta conocer de verdad y de corazón... cada instante es importante y no hay que esperar el momento justo, hay que hacer de un segundo el momento justo; ya que lo compartido ahora no será igual a lo que se viva un segundo después y si no se vive, nunca volverá a haber algo exactamente igual.
Aprendí que existen las segundas oportunidades, pero también, entendí que depende de uno aprovechar un nuevo intento... También aprendí a darlas, pero desde ahora de verdad solo será hasta la segunda, porque creo que valgo más que una rogativa frente a un hecho.
Aprendí lo duro que puede ser enfrentar realidades y  el resurgimiento de miedos que alguna vez atormentaron mi vida, pero ahora trato de enfrentarlos con mayor madurez, sin embargo, sigue costando mucho...
Aprendí que decir las cosas una y otra vez, no sirve de mucho porque los oídos son sordos o se hacen los sordos frente a la realidad, que sin duda, en su mayor vida parece injusta...
Aprendí que una palabra o una frase, que he dicho de corazón, va más allá de las letras que la forman, sino que se hace casi tangible en el valor que le da quien la recibe... y puta que cuesta encontrar personas reales y no de cartón.
Sé que esto parece juicio valórico, pero no es eso... es más que nada un paso más, que hoy he dado.
Al final, no todo es tan malo, aunque lo que escribo parezca de un pesimismo inmenso...
Estoy vivo y amo.


Son las 4:18 de la mañana del 25 de Diciembre de 2010... Gracias por leer!!!



1 comentario:

  1. ooohhh, Rafa...
    Me dejaste plop...
    Encontré bello lo que escribiste, porque abriste tu corazón para hacerlo.
    Te quiero mucho, y espero que este nuevo año sea como realmente te mereces.
    Besos!
    Pame.

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