domingo, 27 de noviembre de 2011

SUEÑO

La oportunidad de hablar con claridad se diluye cada vez más en esta triste realidad que condena a la muerte en vida.
La niebla de la incertidumbre y de la maldita aceptación de la verdad envuelve mi alma dejándola sin rumbo... ¿qué se hace cuando no hay nada que hacer? ¿cómo se puede avanzar si el presente me ancla y me deja sin futuro?
No tengo respuestas, nunca las tuve. Sólo imaginé un camino pavimentado en nubes, que nunca se cimentó en alguna verdad, sólo imaginé. Imaginé abrigo, seguridad, reciprocidad, tantas cosas que abrían mi mente concreta dejando ver el corazón oculto, dormido que, sin embargo, pudo despertar pero despertar a un sueño. Definitivamente esto no es despertar, el mundo seguía avanzando, los sentimientos se entrelazaban en otras vidas y yo seguía en mi sueño letánico.
Pero un día desperté a la realidad y, tocando fondo, me di cuenta que sigo soñando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario